Especial.- En el Evangelio de Lucas, diez leprosos claman a Jesús desde lejos. Solo uno, un extranjero, regresa para agradecer. Su gesto revela una fe que salva. Jesús lo reconoce: “Tu fe te ha salvado”. No solo sana su cuerpo, sino su alma. La gratitud se convierte en alabanza, y la alabanza en salvación.
Naamán y el Jordán: el poder de obedecer con fe
La primera lectura narra la historia de Naamán, general sirio. A pesar de sus dudas, obedece al profeta Eliseo y se sumerge siete veces en el Jordán. Su curación física lo lleva a reconocer al Dios de Israel. Como el leproso del Evangelio, su fe lo transforma. Ambos descubren que la salvación nace del encuentro con Dios.
Sanación espiritual: más allá del milagro físico
La fe no solo cura enfermedades. Transforma vidas. El apóstol Pablo recuerda a Timoteo que “si morimos con Cristo, reinaremos con él”. La salvación implica perseverancia, conciencia y confianza. El baño del Espíritu revela el sentido profundo de la existencia. La fe en Jesucristo es fortaleza y victoria.
María, camino hacia Jesús: palabras del Papa León XIV
Durante la Eucaristía en Plaza San Pedro, el Papa León XIV destacó que “la espiritualidad mariana tiene a Jesús como centro”. María nos enseña a ser discípulos, a ir al encuentro del otro. Su ternura revela la misericordia divina. “La devoción mariana debe ser motor de renovación”, afirmó. Pidió a María Santísima que interceda por la humanidad.
Gratitud por el Concilio Vaticano II: 63 años de renovación
El obispo Freddy Fuenmayor recordó el aniversario del Concilio Vaticano II. Convocado por San Juan XXIII, marcó un antes y un después en la Iglesia. “Damos gracias por los vientos de renovación que trajo el Espíritu”, expresó desde Los Teques. Su mensaje concluye con una bendición para todos los fieles.
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